lunes, 12 de mayo de 2014

El Mini Cooper, el símbolo del renacer de la Industria británica.

              

El Mini, un pequeño auto que cautivó a toda Gran Bretaña y gran parte del mundo en los últimos 40 años, tiene una historia tan rica como para haber sido considerado el auto inglés del siglo XX.
La década de los cincuenta fue muy difícil para Europa. La reconstrucción luego de la Segunda Guerra Mundial había obligado a las diferentes casas automotoras crear modelos más económicos, durables y compactos acorde a los nuevos tiempos.
En una medida de urgencia, las fábricas Morris y Austin decidieron crear en conjunto un conglomerado que pudiera satisfacer sus necesidades: la British Motor Corporation (BMC).
              
La nueva marca tenía como principal objetivo la construcción de un auto pequeño, económico, de acorde a las necesidades de entonces. Alec Issigonis, entonces Jefe de Ingenieros de la BMC, tuvo a cargo tal tarea.
Así, el 26 de agosto de 1959, la British Motor Corporation por fin lanzó al mercado el Austin Seven y el Morris Minor, o simplemente Mini.
                     
Morris mini Minor de 1959
                
Luego de varias presentaciones, donde el pequeño auto obtuvo las más diversas opiniones, un ingeniero llamado John Cooper presentó un proyecto a Issigonis para adaptar al Mini un motor deportivo. El motor fue elevado de 850 a 997 cc, era de doble carburación y tras algunos retoques nació en 1961 el Mini Cooper, el más famoso de todos los coches británicos.
                            
Mini Cooper de 1961
Tras dos años y 24.860 unidades producidas, el Mini de John Cooper había alcanzado el éxito que tanto se había esperado con el primer modelo, no solo en ventas, sino en las competiciones del motor siendo múltiple ganador del Rally de Montecarlo con la versión de 998 cc, tal vez sea el Mini Cooper uno de los coches emblemáticos de este Rally.

                       

En 1964 se presentó el Mini Cooper S de 970, 1071 y 1275 cc, más potentes que sus predecesores.  La versión más popular fue la de 1275 cc, produciéndose más de 40000 unidades; mientras que las versiones de 970 (976 unidades) y 1071 (4031 unidades) no alcanzaron las ventas esperadas.

                     
Mini Cooper S - 1964
En la segunda mitad de 1967 se reemplazaron todos los modelos por la nueva gama MkII, con algunos cambios pero sin el éxito de los MkI. En 1968 finalizó la producción del Mini Cooper de 998 cc, con más de 55000 unidades en su haber. Así finalizaba la era de oro de los Minis, no sin antes lanzar una tercera generación llamada Cooper MkIII, aunque sólo duró hasta 1971.

                           
Mini Cooper MK2 
Pero no sólo Cooper fue el único fabricante de Minis. Durante las siguientes dos décadas, una infinidad de Minis fueron construidas por una multitud de fabricantes en las más variadas versiones. Desde Gran Bretaña hasta Australia, pasando por Italia y hasta en Uruguay, más de 5 millones de Minis fueron esparcidos por el mundo entero.
En 1990 se producen 1000 unidades del llamado Cooper RSP (Rover Special Products), un coche que alcanzaba los 150 km/h. En 1991, este modelo fue reemplazado por uno con un motor más moderno electrónicamente; y aunque con ligeros cambios, esta versión perduró hasta el 2000, donde cesó su producción para siempre.
      
Mini Cooper RSP

Hoy, el nuevo Mini Cooper tiene el protectorado de BMW, con lo que se asegura un largo futuro. Un digno representante de uno de los autos más populares de la historia.










No hay comentarios:

Publicar un comentario

No escribas en mayúsculas y se respetuoso.